Toda la Casa Histórica está siendo pintada, con el blanco a la cal y con el color especial “azul de Prusia” para puertas y ventanas con que se la engalanó en el momento del Congreso de 1816, por pedido de Bernabé Aráoz, quien había indicado que llevara los colores de la Bandera. La directora de la institución, Cecilia Guerra, dijo que se espera tener todo listo antes del martes para que se puedan realizar los actos del 9 con la probable visita del presidente Alberto Fernández.
Guerra cuenta la historia de los colores: como se sabe, la casa fue demolida. En 1942 se reconstruyó su frente gracias una foto de 1869 de Ángel Paganelli, pero se la pintó de amarillo, acaso por la influencia de un cuadro que había pintado Genaro Pérez, que la imaginó de paredes amarillas y puertas y ventanas verdes. En la reconstrucción quedó amarilla, con puertas y ventanas color madera. Una investigación de Juan Carlos Marinsalda permitió saber de los colores que había pedido Bernabé Aráoz y por ello desde 1996 está pintada como en el año de la Independencia.
Guerra explicó que está prevista para la medianoche del 8 una vigilia en el interior (en el Salón de la Jura) como la del año pasado, con estricto protocolo sanitario para pocas personas y que no habrá presencia de agrupaciones gauchas ni desfile. Se ha pedido al COE autorización para que a partir del 9 se puedan abrir las puertas al público. Se está preparando una muestra de randa que se inaugurará el 10. Es una exposición interinstitucional traída del Museo Nacional del Traje, coordinada entre el Museo de la Casa Histórica, el ente de Cultura y la UNT. Parte de la muestra estará en el Centro Cultural Virla.